Plan de verificación y optimización alimentaria

Mié, 20/04/2005 - 11:26
Por FAUBA

La FAUBA se encuentra capacitando a verificadores alimentarios que a partir de mayo comenzarán un relevamiento en 1180 establecimientos educativos de la ciudad de Buenos Aires.

La iniciativa de la Dirección de Cooperadoras y Comedores del Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires fue planteada, en agosto de 2004, a las autoridades de nuestra casa de estudios. Forma parte de un plan de mejora en la provisión de alimentos para los comedores de todas las escuelas, desde nivel inicial a medio, que dependen de la Secretaría de Educación del gobierno porteño.

Desde febrero de este año, once alumnos en el último tramo de su carrera, y un graduado, de la Licenciatura en Gestión de Agroalimentos, reciben capacitación de profesores de la FAUBA y del plantel de nutricionistas del gobierno de la ciudad. La primera semana de mayo, iniciarán su trabajo de campo recorriendo 500 edificios con 1180 establecimientos, para seguir de cerca el circuito de más de 300 mil raciones diarias, entre desayunos, almuerzos, meriendas y cenas, que se distribuyen en estos comedores.

Para cumplir con el objetivo, el equipo de la FAUBA seguirá de cerca el circuito completo de las raciones, desde la materia prima hasta el producto terminado, pasando por la evaluación de las prácticas de manejo del personal, las instalaciones, las cadenas de frío, la forma de empaque y la calidad alimentaria. La Facultad puso a disposición de este programa el Laboratorio de análisis especiales de la cátedra de Bioquímica, y también los análisis sensoriales que fueran necesarios.

Como parte de su práctica pre-profesional, los alumnos de la FAUBA, supervisados por los profesores, tendrán hasta noviembre una dedicación exclusiva para las tareas de verificación. Al finalizar su trabajo, la Facultad entregará al gobierno un diagnóstico acompañado por un plan de trabajo con recomendaciones para optimizar la seguridad, calidad e higiene alimentarias.

De este modo, la facultad logra una vez más insertarse de modo activo en la realidad nacional, devolviendo al país sus conocimientos en pro del bienestar y desarrollo de la sociedad.

Una golosina muy especial

La FAUBA acaba de finalizar el diseño de un complemento nutritivo para satisfacer carencias nutricionales en los niños. El producto, a pedido también de la Dirección General de Cooperadoras y Comedores Escolares, fue pensado para reemplazar las colaciones habituales, generalmente golosinas comerciales con alto contenido de grasas e hidratos de carbono. Se trata de un bizcocho a base de algarroba, un vegetal autóctono que permite el cultivo sustentable, en el que se combinaron hortalizas deshidratadas. Este alimento provee una cantidad balanceada de nutrientes, tiene alto contenido de fibras y es rico en vitaminas y minerales. Aunque ya terminada en laboratorio, a la golosina le falta atravesar las probaturas en paneles con niños. Mediante estudios sensoriales, validados científicamente, se evaluará la aceptación de las propiedades organolépticas (apariencia, aroma, sabor, consistencia) del bizcocho, a fin de asegurarse que sea deseable y sabroso para sus destinatarios. Luego, habrá que iniciar la etapa de industrialización del producto.

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Sobre el autor

Facultad de Agronomía - Universidad de Buenos Aires