Desde los primeros días de marzo, a raíz del progreso de la pandemia de COVID-19, hemos puesto en marcha una serie de acciones tendientes a minimizar el impacto de la enfermedad, en consonancia con las Resoluciones de la Universidad de Buenos Aires y las disposiciones del Gobierno Nacional, y asegurar a la vez, el funcionamiento esencial de nuestra Facultad.

El 8 de marzo, el Ministerio de Educación de la Nación difundió una serie de medidas para prevenir la enfermedad y sugirió que el personal de los establecimientos que regresaran de viaje desde áreas con circulación y transmisión del coronavirus, permaneciesen en su domicilio sin concurrencia y evitaran el contacto social por CATORCE (14) días. Al día siguiente, el Rector de la Universidad de Buenos Aires dispuso el carácter de aplicación de esta restricción, expresando que quienes regresaran del exterior deberían abstenerse de ingresar a las jurisdicciones de la UBA hasta transcurridos quince (15) días desde su arribo a la República Argentina. Ambas resoluciones fueron difundidas inmediata y repetidamente en nuestra comunidad para asegurar su cumplimiento. Se procedió asimismo a relevar qué miembros de la FAUBA se encontraban en el exterior y se verificó el cumplimiento de la cuarentena para todos los estudiantes extranjeros que estaban realizando intercambios en nuestra Facultad. Sin embargo, al reanudarse las clases el lunes 10 de marzo, existieron indicios de incumplimientos de la Resolución del Rector y, además, se atendieron varias consultas y dudas sobre su alcance, debido a que durante esa semana el listado de países con circulación y transmisión de coronavirus fue ampliándose progresivamente.

Relaciones Internacionales de la UBA encaró una serie de acciones destinadas a estudiantes, docentes, investigadores y becarios que se encontraban en procesos internacionales o que tenían planeado actividades durante 2020. A partir de ese momento la Dirección de Relaciones Internacionales de FAUBA ha efectuado un seguimiento no solo de las personas involucradas sino también de los diferentes programas vigentes, sus reprogramaciones y cancelaciones. El trabajo se continúa aún en tiempos de cuarentena.

Como, simultáneamente, creció el riesgo de dengue en nuestra Facultad, encontrándose nuestro predio en una región de la CABA con alta incidencia de la enfermedad, con detecciones locales de oviposiciones y mosquitos transmisores, y con evidencias de circulación de la cepa DEN-4, se procedió a conceder licencia y justificación de inasistencias a quienes se encontraban en el grupo de riesgo para esa enfermedad a partir del 12 de marzo. La FAUBA comenzó, durante esos días, a realizar un relevamiento de las capacidades existentes para el dictado de clases a distancia, para estar preparados ante un eventual agravamiento de las condiciones sanitarias.

El 13 de marzo se amplió el Alerta Sanitaria en nuestro país y se decretó el aislamiento obligatorio no solo para personas con síntomas sino a grupos con alta probabilidad de estar enfermos. El sábado 14 el Rector de la UBA recomendó a las Unidades Académicas reprogramar las clases hasta el 12 de abril y suspender, hasta esa fecha, todas las reuniones y actividades presenciales, y el 16 de marzo se suspendieron todas las actividades no esenciales de la UBA. Frente a esto, entre el 16 y el 19 de marzo, en la FAUBA se realizaron las siguientes acciones específicas:

  • Reglamentación de la aplicación de las resoluciones de Rector y Consejo Superior al ámbito de la FAUBA, mediante Resoluciones de la Sra. Decana
  • Diseño de una estructura mínima de personal esencial operativo con asistencia diaria a al predio de la FAUBA y de la Escuela Hall, para cubrir tareas de 24 horas en las Bedelías de los Pabellones Central y Parodi guardias que garantizan la seguridad de la FAUBAy de la Escuela Hall y el no ingreso de terceros no autorizados por la UBA, mantenimiento edilicio y de campo del predio, alimentación y cuidado de animales y descacharreo permanente. Como párrafo aparte, expresamos nuestro reconocimiento a todo el personal que asiste a la FAUBA y de la Escuela Hall a riesgo de su salud y la de sus allegados, con el solo objetivo de cuidar la fuente de trabajo de toda nuestra comunidad.
  • Puesta en marcha del trabajo administrativo a distancia. Durante el período de cuarentena total y obligatoria, el área administrativa comenzó a realizar sus tareas desde sus domicilios, tratando de que la fluidez de los trámites se altere lo menos posible. Las áreas administrativas que continúan trabajando desde sus domicilios son Mesa de Entradas, Despacho, Dirección de Alumnos, Contabilidad, Personal, Tesorería, Asesoría fiscal, Comunicación Institucional, Pasantías, Vinculación y Graduados, Compras y la Dirección General Administrativa. Se realizan prioritariamente tareas de liquidación de sueldos, pagos en general y movimientos de fondos. La Dirección de Compras trabaja en la reprogramación de las tareas de manera que se asignen nuevos plazos cuando sea posible. Se encuentran suspendidas temporalmente las demás operaciones, las que se irán incorporando en forma paulatina y en la medida que los procesos resulten viables.
  • El personal de Consejo Directivo trabaja a distancia para garantizar la renovación de cargos informada por los Departamentos Académicos y los nombramientos y resoluciones pendientes.
  • Además de las dependencias mencionadas todas las direcciones y áreas nodocentes atienden a distancia las necesidades puntuales que surgen en una coyuntura tan difícil y sin precedentes.
  • Con respecto a la docencia, se trabaja en conjunto con los docentes responsables de los cursos de grado, para el dictado de cursos a distancia (ver Las clases en tiempos del Covid-19).
  • Tramitación ante la UBA de autorización para el dictado de cursos de posgrado de manera no presencial
  • Reprogramación de actividades y obras en la FAUBA
  • La atención de la EFA, el CIFA y de la Biblioteca Central continuó hasta el 19 de marzo para facilitar la venta de libros y apuntes y el préstamo de ejemplares a nuestros estudiantes. Fue interrumpida el 20 a partir del Decreto de Aislamiento Preventivo Obligatorio Actualmente, con lógicas limitaciones, continúan su actividad a distancia, al igual que el Área de Divulgación Científica.
  • Tramitación, ante la UBA, de los permisos especiales de circulación para el personal que desarrolla tareas estrictamente esenciales, así como para aquellos investigadores informados por los Profesores a cargo y los Directores de Instituto que de interrumpir sus tareas hubiera implicado el fracaso de investigaciones en curso. Estos permisos fueron resueltos por autorizaciones especiales del Rector.

Al cierre de esta edición de Decanato Informa es aún incierto el panorama para los próximos días o semanas. Sin embargo, la rápida respuesta de la Universidad de Buenos Aires y de la comunidad de la FAUBA para hacer frente a esta pandemia, permite suponer que todos los inconvenientes que surjan serán subsanados. Lo importante, ahora, es que todos y cada uno se cuiden, mantengan el aislamiento social obligatorio y el cuidado y atención de su salud y de toda la sociedad.